Perfil del Médico Geriatra

El geriatra es el médico especialista en la atención integral de las personas adultas mayores. Posee los conocimientos, habilidades y actitudes necesarias, adquiridas mediante una sólida formación académica, para realizar acciones de prevención, diagnóstico, tratamiento y rehabilitación, con un enfoque holístico centrado en el proceso de envejecimiento, la historia natural y la fisiopatología de las enfermedades y síndromes geriátricos.

Con criterio clínico y capacidad de gestión, el geriatra coordina de forma eficaz al equipo de salud, promoviendo un trabajo interdisciplinario y transdisciplinario que garantice el nivel de atención más adecuado para cada persona adulta mayor.

Perfil del Médico Geriatra

Actúa con responsabilidad, calidez, empatía, tolerancia y un alto compromiso ético, generando en el paciente, su familia, la comunidad y la sociedad, una conciencia que promueva la autonomía en la medida de lo posible, así como los recursos necesarios para garantizar una vida digna hasta el final.

Además, el geriatra cuenta con el juicio crítico para seleccionar, analizar y aplicar la literatura médica, tanto de su especialidad como de las ciencias humanísticas y espirituales, integrándolas de manera pertinente a su práctica diaria para sustentar, ampliar y enriquecer su desempeño profesional.

CONOCIMIENTOS / CONCEPTOS
  • Del proceso de envejecimiento, la epidemiología, historia natural y fisiopatología de las entidades nosológicas, los síndromes geriátricos y los cuidados paliativos.
  • De los métodos para la prevención primaria y secundaria de las enfermedades y síndromes geriátricos prevalentes en la persona adulta mayor (prevención gerontológica).
  • Del proceso de envejecimiento normal y su relación con las enfermedades y la discapacidad en la persona adulta mayor.
  • De la historia natural de la fragilidad y de la dependencia, sus manifestaciones, vías de adquisición y formas de prevención.
  • De los aspectos de multimorbilidad, fragilidad y discapacidad en la persona adulta mayor.
  • De la indicación, utilidad, riesgos y complicaciones de los procedimientos diagnósticos y terapéuticos disponibles.
  • Del uso apropiado y seguro de los fármacos en la persona adulta mayor.
  • De los diferentes modelos de atención en salud dirigidos a personas adultas mayores.
  • De la finalidad, los recursos necesarios y su utilización racional para organizar y dirigir de forma eficaz una unidad o servicio de Geriatría, así como para guiar o participar en la formación de especialistas en dichos espacios.
  • De la organización de los servicios comunitarios, sociales y de salud, tanto intra como extrahospitalarios, orientados a la atención de personas adultas mayores.
  • Del fomento del envejecimiento activo y saludable.
  • Del método científico y de los principios de la docencia.
  • Del método estadístico aplicable a la investigación clínica y epidemiológica del envejecimiento y sus implicaciones.
  • Del conocimiento y aplicación de los cuidados espirituales y humanistas en la salud y bienestar de la persona adulta mayor.
HABILIDADES
  • Para establecer una relación médico-paciente, así como médico-familia y cuidadores, basada en la confianza mutua.
  • Para llevar a cabo una valoración geriátrica integral mediante un interrogatorio ordenado, concreto, completo y congruente con el padecimiento, y realizar una exploración física metódica, precisa y adecuada a los problemas clínicos de la persona adulta mayor.
  • Para integrar, de forma oportuna y jerárquicamente ordenada, los diferentes problemas médicos de la persona adulta mayor y planear un programa adecuado de prevención, estudio, tratamiento y seguimiento, incluso en situaciones de urgencia.
  • Para realizar el diagnóstico diferencial mediante la selección lógica de hipótesis alternativas, considerando las manifestaciones atípicas de las enfermedades en la persona adulta mayor.
  • Para interpretar estudios de laboratorio y gabinete accesibles y pertinentes para el abordaje de enfermedades de alta prevalencia en esta población.
  • Para llevar a cabo procedimientos diagnósticos y terapéuticos necesarios para la atención de enfermedades comunes, incluyendo aquellos requeridos en situaciones urgentes, siempre que no involucren anestesia general, quirófano o tecnología de alta complejidad.
  • Para elaborar un plan inicial de atención y control centrado en la persona adulta mayor, que contemple la participación del equipo multidisciplinario y respete la voluntad del paciente.
  • Para proporcionar cuidados centrados en la persona adulta mayor con condiciones de salud complejas.
  • Para brindar atención a personas adultas mayores en modelos de salud no hospitalarios.
  • Para responder a las necesidades espirituales de las personas adultas mayores, mediante la empatía, la comunicación efectiva, la escucha activa y la aceptación incondicional.
  • Para desarrollar y ejercer valores centrados en la persona, tales como el respeto, la tolerancia, la flexibilidad, la empatía, la calidez y la gentileza.
ACTITUDES
  • Espíritu humanista y vocación de servicio.
  • Disposición para abordar integralmente a la persona adulta mayor, considerando los aspectos biológicos, psicológicos y sociales de su salud.
  • Apertura y sensibilidad para establecer una comunicación efectiva con pacientes, cuidadores y familiares.
  • Capacidad de autocrítica para reconocer sus propios límites, solicitar apoyo cuando sea necesario y referir al paciente a otros especialistas de manera oportuna.
  • Disposición para el trabajo en equipo, tanto como apoyo a otros profesionales como en el rol de coordinador de un equipo de salud.
  • Compromiso con la actualización continua y el desarrollo profesional, así como con la transmisión de conocimientos y experiencias a pacientes, familiares, estudiantes y colegas.
  • Criterio clínico para seleccionar estudios diagnósticos y procedimientos terapéuticos que ofrezcan las mejores opciones en términos de salud, minimizando molestias y reduciendo el costo social y económico para la persona adulta mayor.
  • Sensibilidad para considerar las implicaciones personales, familiares y sociales de la atención médica, con el fin de brindar una mejor orientación, apoyo y cuidados centrados en la persona adulta mayor.
  • Deseo y capacidad para el trabajo interdisciplinario en equipos de salud.
  • Conciencia de su responsabilidad social y del papel que desempeña dentro del sistema de salud.
  • Actuar en todo momento conforme a los principios de la bioética.

Avisos

Comunicados